If you want to take a break from Sauvignon Blanc and Chardonnay, look no further.
Here in Chile, it’s hard not to drink anything other than Sauvignon Blanc as your choice of white wine because it’s so reliable, ubiquitous and cheap. It’s also perfect with seafood.
Outside of Chile, New Zealand and Loire Valley Sauvignon Blanc can also fill that need. In addition, everyone already knows Pinot Grigio while Chardonnay is just as universal as Sauvignon Blanc, especially for those who like oakier and creamier versions of whites.
However, two whites that are a little harder to find but are worth trying are Chenin Blanc and Albariño. Both can be found in the dry and zesty style that typical Sauvignon Blancs have. The former can also be found in oaked versions as well as sparkling and sweet wine formats. Both will have less herbal notes than Sauvignon Blanc.
Albarino is a zesty, dry mineral driven white mostly grown in Rias Baixas in Galicia, Spain and Vinho Verde, Portugal. I’ve also tried a good one from Sinor-Lavallee in Avila Beach, San Luis Obispo County, California. However, it’s also found a home in Uruguay, so I’m excited to try my first Uruguayan Albarino.
Chenin Blanc, on the other hand, is the most important white grape in South Africa with more than 50% of the world’s Chenin Blanc planted there. It’s also well known in the Loire Valley in places like Vouvray and Saumur. It can be made in a similar crisp, dry and minerally style as Albarino or in sweet and sparkling wines. I was surprised to find a South African Chenin Blanc in Chile, so I pounced on it.
Tasting Notes
2018 Beaumont Chenin Blanc Bot River Walker Bay South Africa Screwtop. No oak at all. I don’t think they do malolactic either. Low 12.5% alcohol. 65,000 bottles made. Pale color. Reticent nose. Perhaps a bit too cold. It’s fresh with pineapple and a bit of minerality. The palate is round, more on the ripe pear side with good acidity. It’s a bit spritzy too. Overall, it’s not too far off from a typical Chilean Sauvignon Blanc I drink all the time. However, it’s slightly sweeter/fruitier, slightly less acidic and a little rounder/oilier on the palate, so Chardonnay drinkers might also like it. Very easy to drink. You’ll end up finishing the bottle very quickly. Had with some seafood creole rice, which was a good pairing although it’d be even better with something spicier like a New Orleans seafood gumbo or jambalaya. 89 pts AC.
19,000 CLP at Les Dix Vins in Chile. ~$19 outside of Chile.
2018 Garzón Reserva Albariño Uruguay Screwtop. Light golden color. Fresh ripe nose of peach while the palate is more towards tropical fruit, but also with refreshing acidity. 14% alcohol. It spends 3 to 6 months on fine lees in stainless-steel tanks. Definitely fruitier and fuller than the Chenin Blanc and compared to most Alabrino from Rias Baixas, but there’s still plenty of acidity to keep it crisp with a bit of minerality. It’s still a dry white that also goes well with seafood. Garzon is also located close to the Atlantic (albeit the other side of the Atlantic) much like the Albarino of Galicia, so it gets some ocean influence in the wine. Although I like the less tropical style of the Chenin Blanc better, this Alabrino is just a little more expressive at the moment. Also another wine that can bridge the gap between Sauvignon Blanc and Chardonnay drinkers, but unoaked versions. 90 pts AC.
11,000 CLP at Mundo del Vino. ~$19 outside of Chile.
Aquí en Chile, es difícil no beber nada más que sauvignon blanc como su elección de vino blanco porque es muy confiable, ubicuo y barato. También es perfecto con mariscos.
Fuera de Chile, los sauvignon blancs de Loira y Nueva Zelanda también pueden satisfacer esa necesidad. Además, todo el mundo ya conoce el pinot grigio, mientras que el chardonnay es tan universal como el sauvignon blanc.
Sin embargo, dos blancos que son un poco más difíciles de encontrar pero que vale la pena probar son el chenin blanc y el albariño. Ambos se pueden encontrar en el estilo seco y fresco que tienen los típicos sauvignon blancs. El primero también se puede encontrar en versiones en roble, así como en formatos de vino espumoso y dulce. Ambos tendrán menos notas de hierbas que el sauvignon blanc.
El albariño es un blanco fresco, seco, salino y mineral, cultivado principalmente en las Rías Baixas en Galicia, España y Vinho Verde, Portugal. También probé uno bueno de Sinor-Lavallee en Avila Beach, San Luis Obispo, California. Sin embargo, también encontró un hogar en Uruguay, así que estoy emocionado de probar mi primer albariño uruguayo.
henin blanc, por otro lado, es la uva blanca más importante de Sudáfrica, con más del 50% de la chenin blanc mundial plantada allí. También es muy conocido en el Valle del Loira en lugares como Vouvray y Saumur. Puede elaborarse con un estilo fresco, seco y mineral similar al del albariño o en vinos dulces y espumosos. Me sorprendió encontrar un chenin blanc sudafricano en Chile, así que me abalancé sobre él.
Notas de Cata
2018 Beaumont Chenin Blanc Bot River Walker Bay Sudáfrica
Tapón de rosca. Sin roble. Creo que no hagan maloláctica. Alcohol 12,5%. 65.000 botellas elaboradas. Color pálido. Nariz reticente. Quizás un poco demasiado frío. Es fresco con piña y un poco de mineralidad. En boca es redondo, más a pera madura con buena acidez. También se siente un poco gaseado. En general, no está muy lejos de un típico sauvignon blanc chileno que bebo todo el tiempo. Sin embargo, es un poco más dulce / afrutado, un poco menos ácido y un poco más redondo, así que a los amantes de chardonnay también les puede gustar. Muy fácil de beber. Terminarás la botella muy rápido. Lo tomé con un poco de arroz criollo de mariscos, que fue una buena maridaje, aunque sería aún mejor con algo más picante como un gumbo de mariscos de Nueva Orleans o jambalaya. 89 puntos AC.
19,000 CLP en Les Dix Vins en Chile. ~$19 fuera de Chile.
2018 Garzón Reserva Albariño Uruguay
Tapón de rosca. Color dorado claro. Nariz fresca madura de melocotón mientras que el paladar es más hacia la fruta tropical, pero también con refrescante acidez. 14% de alcohol. Pasa de 3 a 6 meses sobre lías finas en acero. Definitivamente más afrutado con más cuerpo que el chenin blanc y comparado con la mayoría de los albariño de las Rías Baixas, pero todavía tiene mucha acidez para mantenerlo fresco con un poco de mineralidad. Sigue siendo un blanco seco que también combina bien con mariscos. Garzón también se encuentra cerca del Atlántico (aunque al otro lado del Atlántico) al igual que el albariño de Galicia, por lo que tiene cierta influencia del océano en el vino. Aunque me gusta más el estilo menos tropical del chenin blanc sudafricano, este albariño es un poco más expresivo en este momento. También otro vino que puede salvar la brecha entre los bebedores de sauvignon blanc y chardonnay, pero sin roble. 90 puntos AC.
11,000 CLP en Mundo del Vino. ~$19 fuera de Chile.